Maniobras difíciles en el carro

La actividad de conducción es una de las más exigentes porque requiere que la persona tenga una total concentración. Durante una jornada de manejo, sin importar la distancia que se recorra, el piloto se enfrenta a una serie de situaciones que exigen de su parte una actitud de alerta.

Debe estar en capacidad para tomar decisiones en fracción de segundos, analizar información que recibe del entorno bien sean otros vehículos, peatones, señales viales o las condiciones mismas del camino, y con base en esos datos desarrollar un manejo seguro, responsable y también eficiente para realizar el trayecto en el menor tiempo posible y el menor consumo de combustible y emisiones.

En el proceso del manejo, el conductor deberá realizar maniobras bien sea para vences obstáculos, como una pendiente; o para girar de manera correcta al entrar en una glorieta o rotonda; la incorporación con el vehículo a una vía principal o vía rápida procedente de una vía secundaria; de igual manera también el proceso de parqueo del vehículo.

No siempre son maniobras fáciles y requieren de un gran nivel de atención y coordinación.

Lo más importante en estos casos es estar atento a las señales y las indicaciones que pueden estar presentes tanto verticales como horizontales y de piso, que dan información útil para realizar el procedimiento de la manera más segura posible.

El buen conductor no se forma en el primer intento, pero sí es vital que siempre conserve la calma cuando va a desarrollar este tipo de maniobras. El estrés no es un buen consejero en la vía.

Fuente: elcolombiano.com