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En lo que podría ser la propuesta más radical para frenar la accidentalidad generada por la irresponsabilidad y la imprudencia, el gobierno acaba de plantearle al congreso castigos hasta de 37 años de cárcel para los “conductores temerarios” que causen muertes.
La tesis del ejecutivo es que no solo los ebrios deben ser metidos en cintura, sino los responsables de otras conductas que este año ya dejan casi 4000 muertos en calles y carreteras. Manejar con exceso de velocidad, transitar en contravía, saltarse una señal de pare o un semáforo, conducir bajo el efecto de las drogas, sin licencia de conducción o hacer “piques” tendrían las mismas consecuencias.
Según las estadísticas el trago aparece en 7 de cada 100 accidentes mortales. El exceso de velocidad y desobedecer las señales de tránsito generan uno de cada cuatro casos con muertos El ejecutivo plantea modificar el código penal y crear el delito “homicidio por conducción temeraria”, equiparable al homicidio simple, que hoy tiene una pena mínima de 17 años y una máxima de 37.5 años.
También se incluye en la propuesta la política de cero tolerancia frente al alcohol, planteando multas de 1,2 millones de pesos, inmovilización del carro hasta por un mes y suspensión de la licencia hasta por 5 años. Se incrementan los castigos de acuerdo con la gravedad del accidente y las lesiones permanentes podrían ser castigadas con 13 Años de prisión y multas de $3 millones.
Fuente: ADN Bogotá
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